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Cambio de estereotipos


Por Herótido Rodríguez
hrodríguez_5508@hotmail.com

Qué es un estereotipo? Estereotipo (etimológicamente proviene de la palabra griega stereos que significa sólido y typos que significa marca): Es una imagen trillada, con pocos detalles acerca de un grupo de gente que comparte ciertas cualidades, características y habilidades. Por lo general ya fue aceptada por la mayoría como patrón o modelo de cualidades o de conducta. El término se usa a menudo en un sentido negativo, considerándose que los estereotipos son creencias ilógicas que limitan la creatividad y que sólo se pueden cambiar mediante la educación.

Durante muchos años, Tamboril fue gobernado por personas que no se interesaron en lo más mínimo por cambiar y mejorar sus condiciones físicas. Iniciar un proceso de desarrollo a corto y largo plazo dirigido a transformar toda su estructura, de manera que nuestros conciudadanos dispusieran de áreas para el recreo y de una infraestructura municipal moderna, cómoda y ajustada a los requerimientos de los nuevos tiempos, y al servicio de la población.


Todo lo contrario, los munícipes fueron objeto de estafa por parte de los políticos que descaradamente usaron los recursos municipales para sus propios beneficios y los deseos de sus acólitos, en prejuicio de la municipalidad, el crecimiento y del desarrollo de Tamboril.

Este estilo de manejar las cosas públicas, contribuyó a la conformación de un modelo (negativo) que desfavoreció lo que debió ser el Tamboril del futuro. No hubo planificación estratégica del tipo de ciudad que debíamos alcanzar. El clientelismo político y el estado de dependencia obligado, diezmaron las perspectivas futuras del municipio, creando los estereotipos que hoy están en contra del desarrollo que se ha iniciado.

Este modelo del pasado, ha chocado con el nuevo estilo de dirección del actual Alcalde Anyolino Germosén. El nuevo administrador del Ayuntamiento de Tamboril, capacitado, con un criterio de desarrollo y progreso diferente, ha entendido que las décadas perdidas y el abandono municipal pueden recuperarse en corto tiempo y ha mostrado un perfil distinto de lo que debe ser una administración moderna y cómo deben ser usados los recursos.

Naturalmente, esto choca con los deseos de los viejos estereotipos que quisieran que el nuevo alcalde dilapidara los recursos del pueblo, en vez de invertirlos. Por eso sus críticas rabiosas e irracionales y sus inconformidades con todo. No soportan ver un Parque Doña Trina de Moya, nuevo y remozado. Las inversiones en la Presidente Vásquez, y un bulevar con luces las 24 horas.

Las nuevas autoridades de Tamboril han comenzado bien. En nuestro municipio hay muchas cosas que hacer, porque nada se había hecho. Es necesario seguir construyendo lo que falta, rompiendo con los viejos esquemas y propiciando el desarrollo que deseamos y que merecemos.

Alguien tiene que ser la diferencia. Los expertos en criticar las cosas útiles como dice la palabra de Dios, seguirán ciegos. Porque viendo no verán y oyendo no oirán. Adelante Licenciado Anyolino, como dice el Evangelio de Mateo 15:14; “Dejadlos; son ciegos guías de ciegos, y si el ciego guiare al ciegue, ambos caerán en el hoyo”.

Además del Parque Doña Trina de Moya, hay que remozar a todo Tamboril. Este municipio está confiado en su gestión, por lo que usted ha mostrado. No se dañe, dañarse es fácil, sobre todo si le hace caso a los bombarderos de la desesperanza. Sus obras señor alcalde, harán que Tamboril no olvide 100 años de abandono y despilfarro. Son seis (6) años, sólo va uno (1).

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