CABO CAÑAVERAL, Florida, EE.UU. — Los científicos de la NASA están estrujándose los sesos para determinar dónde caerá un satélite de seis toneladas en los próximos días.
Ocurre que si los cálculos están apenas equivocados, la diferencia del lugar de impacto podría ser tan amplia como entre Miami y Nueva York o entre India e Irán.