La Alegoría de la Rosa y la Magia Juguetona de la Vida
Puedo navegar con el barco del amor
Por las ondas siderales de los sentimientos
Y esculpir sereno una aureola corazón
Con el pincel romántico que agita el pecho.
Puedo fabricar esmeraldas de ilusiones
Maripositas y duendes que se confundan con el viento;
Volar directo a sus amados corazones
Para gritarle al mundo entero que el amor es algo bueno.
Puedo sembrar en el surco alismáceo de la felicidad
Dos intenciones hermosas que crecen junto a la alegría
Al compas del Higgs Boson de su natural velocidad
Para estabilizar el ritmo melodioso de su grandiosidad:
La alegoría de la rosa y la magia juguetona de la vida.
Puedo expresarles los versos más osados
En esta era cibernética donde el verso asimismo se indulta
En el laberinto infinito de los enamorados
Que muestran poesías fotográficas vía Internet y sus rutas.
Puedo decirles a Indiana ya Johan
Que sus padres los formaron bien:
Por ejemplo el Papá de Indiana era un dirigente revolucionario de la UNER,
Su madre es un ejemplo que demuestra con decencia el valor de la mujer;
De igual modo el padre de Johan, un hombre ejemplar que llamo Tío Manuel,
Y su madre Pina, poblada de valores humanos adheridos al son del nacer…
¡Que hermosa es la vida y su tren
Cuando nuestros ancestros nos han formado con la vara mágica del saber!
Felicidades Indiana Domínguez y Johan Rosario en este día tan especial
Donde sus dos almas acotejan un nido sempiterno con visos de pureza,
Para crear el jardín perpetuo que se arrima con sus flores de valor singular,
Hacia el soñado paraíso que aspiramos del perfume que destila la cereza.
Puedo diseñar los besos más perfectos que se acomodan a la boca perfecta
Para que un simple ungir-espumajo contagie de pasión cada hebra del cuerpo;
El mismo cuerpo que bajo la influencia de la salivación aplaude el amor y su fiesta
Encantada con el murmullo sublime que se desprende del silencio poético.
Pido al Dios de las Alturas
Que colme de felicidad a estos dos colosos de la luz y de la sabiduría;
Y que el Amor y su Albura
Los premie con la alegoría de la rosa y la magia juguetona de la vida.
Por: Manuel Rosario (Manuel Aurelio Rosario Rodríguez)
