Tu sonrisa se desparrama en el aire y llena de cielos la brisa, tus ojos en llamas se esconden tras los blancos prados tu voz me llama y prende fuego sin muertes.
Tu amor no arranca ojos, tu violencia no mata, infunde vida la corriente me lleva a tus manantiales, tus lagos, tus promesas, tus piedras de río que preñan mis días.
Llenas los mares de plata y vuelan los perros en nubes, desangras el cielo al alba, y pueblas los verdes de flores.
Rompes con el candor de tu alma todos los cristales que han parado de cortar. Riegas vida en el lugar donde moraban muertes...Por eso eres la elegida...mi esposa. *Johan Rosario. |