Desde la creación del universo se ha visto que la soga rompe por lo más débil. Esto es lo que sucede con el caso de la temible fiebre aparecida en México, que afecta a los mas debiles. Lo sucedido en México pone de manifiesto que los seres humanos nunca nos vamos a comprender y somos tan increíbles, que seriamos capaces de tirarle una pedrada al espejo en el cual nos visualizamos para peinarnos, creyendo que la imagen que aparece en el mismo nos va a robar el ego que llevamos internamente y que constituye el segundo yo de cada persona. La gripe porcina como se le llamo al principio, esta epidemia que ha costado cientos de muertos en varios países, es en estos momentos el nido de los huevos hueros en Estados Unidos en contra de los inmigrantes. Algunos grupos conservadores culpan del mal del mal del virus H1N1 a los inmigrantes ilegales. Estos grupos aprovechando la crisis de salud pública que existe, han exigido que cierren la frontera que asesa el sur del país con México. Sin embargo, el presidente Barack Obama ha expresado que eso no ayudaría en nada a frenar el contagio de una enfermedad respiratoria que ya se registra en la nación norteamericana. Mientras tanto, miles de inmigrantes, las mayorías de ellos con estatus ilegales marcharon para exigir un cese a las redadas y que el congreso apruebe una reforma migratoria integral, es decir, que el gobierno les proporciones los documentos para ellos poder integrarse a los medios de producción.Se calcula que en Estados Unidos hay unos doce millones de indocumentados y en el 2009 vuelve al centro de atención del congreso, ya que en el 2007 intento sin éxito resolver el problema.
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