Basta y sobra con que haya refrendado la negociación del magnate Carlos Slim con Verizon. Desde que la compañía Claro comenzó a operar en RD, sin que se tomaran las previsiones necesarias para evitar el mayúsculo fraude que está desarrollando la empresa del poderoso Slim, el pueblo está pagando caro el tener funcionarios tan incompetentes. Aunque para curarse en salud ha hablado "del mal servicio de muchas telefónicas", la pregunta que necesariamente uno tiene que formularse es: y tú qué rayos haces denunciando en vez de actuar contra esta compañía mexicana que ha llegado al país a ponerlo de rodillas. Nunca como ahora el servicio de los celulares había sido tan horriblemente deficiente: mala señal, cobertura limitada, buzón de voz inservible, averias constantes en el sistema, etc. Mientras tanto, habrá que esperar la próxima vuelta de Slim por el país, ya que con el redondo negociazo que está haciendo, es casi un hecho que llegará una vez más, vino en manos, a tomarse unas copas con José Rafael Vargas -Varguitas- quizás para comprar otra de las compañias nacionales que ofrecen servicios telefónicos. No en vano se dice en México que Slim ha logrado acumular su abultada fortuna engañando descaradamente a sus clientes. La precaria plataforma con que está operando Claro no deja espacio para dudas.
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