El radicalismo desenfrenado que están ejerciendo sectores de ultraderecha contra el Presidente Barak Obama es ya rayano con la locura. Lo que observé esta mañana en un tradicional suburbio al Norte de New York resulta pasmoso. Un grupo de señoras, todas del Tea Party, portando pancartas frente a una estación de correos en Highland Park, proclamando a voz en cuello que Obama es la reencarnación de Adolf Hitler y que, con carácter perentorio, el Congreso debe actuar destituyéndolo, para evitar que el país siga en manos del demonio. Es insólita la oposición rabiosa que le están haciendo al primer presidente negro de este país, acusándolo incluso de promover el uso y consumo de Opio en Afghanistán, de desbaratar las instiituciones de este país., y larguísimo etc. Ya cuando me marchaba del lugar, un demócrata que pasaba por el lugar les voceó algo a las damas, increpándolas por su actitud y estas, en tono airado y desafiante le respondieron: "Devuélvenos nuestro país, comunista de la mierrrr".
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