Ojalá y todas las carreteras de nuestro país fueran así, con ese techo forrado sólo de verde naturaleza, que nos transporta a un mundo colmado de fantasías. Parece la entrada al paraíso mismo, el túnel que nos encantaría tener en la Núñez de Cáceres o el camino directo al país de las maravillas. Camino al Lago Enriquillo encontramos este abarcador paisaje, que se apodera del camino delineándonos nuestra belleza desnuda al natural.
eso es por mi pueblo entre los rios de neyba y villa jaragua. visitenos en esta sema santa
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