 |
| Esta foto de archivo es de cuando Junior tenía 15 años. |
Junior Taveras Rosario -mi primo- es una joven promesa del béisbol cuya vida pende en estos momentos de un delgado hilo. En el día de ayer nuestra familia fue sorprendida con la noticia triste de que un un coágulo de sangre incubado en el joven cerebro de Junior amenaza con robarse toda su luz justo cuando empieza a destellar sus mejores fulgores. Saber que un jovencito con apenas 19 años, lleno de ilusiones y sueños vive tan mala hora, le desgarra a uno el centro de la vida. La operación que precisa Junior para derrotar a la muerte tiene un costo exacto de un millón de pesos. Una cifra respetable para cualquier modesta familia dominicana, pero ante la que no tiemblan los médicos para anunciarla sin espasmo ni remordimiento alguno. Sin plata no mueven una sola pinza, y si hay que morir...pues a la muerte pues y que llamen a la funeraria. Punto. Triste realidad la de nuestro país, en el que las cosas son como son y ya. Máxime si se es pobre, condición en la que hasta preguntar demasiado o pedir caridad irrita a los dignísimos de arriba. En mi nombre propio y de toda mi familia hemos decidido colaborar con RD$50 mil pesos, pero aún falta. Es por ello que apelamos a todo amigo y relacionado que crea en la vida. Ayúdennos a salvar a este joven tamborileño. Es la primera vez que uso de sombrilla mi condición de figura pública para una causa que involucra a un familiar, pero siento que el momento crucial no da brecha para rodeos. Han dado un plazo de 48 horas y quieren un millón cash, si no la muerte tiene amplia ventaja para apagar a Junior Taveras por siempre. Y eso no se puede permitir, no mientras podamos hacer algo para evitarlo. Si desean y pueden donar, háganlo llamando 809-580-9363. Allí hablarán con Pablo Taveras, el padre de Junior. La dirección a la que pueden remitir sus aportes es Avenida Presidente Vásquez #108, Tamboril, Santiago. Dios seguramente está monitoreándolo todo, y permitirá que juntos salvemos esta vida. Salud!
